Érase una vez una mujer llamada Emma que estaba curioseando en una tienda de ropa cuando vio unos pantalones cortos con estampado de cebra. Inmediatamente se sintió atraída por ellos y decidió probárselos.
Mientras estaba de pie frente al espejo, no pudo evitar sentirse un poco cohibida. Los pantalones cortos eran audaces y llamativos, y no estaba segura de tener la confianza para quitárselos. Pero luego recordó una cita que había leído en alguna parte: "La vida es demasiado corta para usar ropa aburrida". Y con eso, decidió comprar los pantalones cortos.
Al día siguiente, Emma decidió usar sus nuevos pantalones cortos con estampado de cebra para su clase de yoga matutina. Mientras entraba al estudio, podía sentir los ojos de sus compañeros yoguis sobre ella. Algunos de ellos quedaron impresionados por su audaz elección de moda, mientras que otros parecían un poco desconcertados.
Pero a medida que avanzaba la clase, Emma comenzó a olvidarse de lo que llevaba puesto y se centró en su práctica. Se sentía fuerte y empoderada, y los pantalones cortos con estampado de cebra parecían darle un impulso adicional de confianza.
Después de clase, algunos de los otros yoguis se le acercaron y la felicitaron por sus pantalones cortos. Admiraron su valentía por usar algo tan audaz y poco convencional. Emma sintió que la invadía una sensación de orgullo: se había arriesgado y había valido la pena.
A partir de ese día, Emma lució con orgullo sus shorts con estampado de cebra. Se convirtieron en un símbolo de su valentía e individualidad. Y quién sabe, tal vez incluso inspiró a algunos de sus compañeros yoguis a arriesgarse con la moda.